Si uno repasa las imágenes más representativas de la historia de la música moderna, lo más probable es que se encuentre, sin advertirlo, con media docena de fotos firmadas por Gered Mankowitz, un artista prematuro, incansable y humilde que siempre ha entendido su trabajo como una manera más de ganarse la vida.
Así, tras fracasar en los estudios, un amigo le dejó una cámara y descubrió que aquello de echar fotos no se le daba nada mal. E hizo bien, porque con sólo dieciocho años se convirtió en el fotógrafo oficial de los Rolling Stones (sí, como en “Casi famosos”; más o menos).
Frente al objetivo del fotógrafo británico desfilaron artistas como Donovan, Kate Bush, The Jam, Eric Clapton o los Yardbirds, y suyas son las portadas de dos discos de los Rolling Stones grabados durante los años sesenta. Aunque son sobre todo sus retratos de Jimi Hendrix los que le han dado más fama.
En total son casi cuarenta y cinco años retratando la música moderna británica y norteamericana, que han encontrado incluso un hueco en una exposición permanente en el National Portrait Gallery de Londres.
Sin embargo, hasta ahora, a nadie le había dado por hacer una retrospectiva de su interesantísima obra, marcada por la sensatez, el equilibrio y la limpieza. Probablemente porque su trabajo es tan evidente y célebre que su importancia siempre ha sido obvia.
En cualquier caso, a partir del próximo 28 de abril, si os dejáis caer por Londres, no dudéis en echarle un vistazo a las Snap Galleries de la capital británica, allí tenéis una cita obligada con esta exposición compuesta por los mejores retratos de su eterna carrera (sigue trabajando).
Aunque quién sabe, a lo mejor tenemos suerte y alguno de nuestros intrépidos galeristas se atreve a acercar a España la retrospectiva.