En la anterior entrada empezamos con unos consejos sobre cómo podemos fotografiar a nuestras mascotas (o la de nuestros amigos) y vimos que tenemos que tener mucha paciencia, preparar el equipo y planificar y pensar qué tipo de fotografía queremos hacerle a ese bichillo. Así que hoy vamos a seguir con algunos consejos más.
Los animales, en general, son muy expresivos, así que es fundamental que nos fijemos con detalle en las expresiones del animal al que vamos a fotografiar. Ya sean los ojos, las orejas o las patitas, algo nos mostrará cómo son ellos, si son tranquilos, nerviosos, entusiastas…, vamos, igual que las personas.
Es por eso que es importante que, después de fijarnos en su forma de ser, le saquemos el mejor partido posible. Esto quiere decir que, si son perros tranquilos, no vale la pena alborotarlos porque se podrán rabiosos y ya no nos dejarán hacerles las fotografías, que más vale dejarlos tranquilos y probar a fotografiarlos así.
Luz natural
Mi recomendación es que siempre intentéis hacer las fotografías a la luz natural, sobre todo si son mascotas ya que poner flash y demás materiales solo significa una cosa, que tendremos que estar atentos a más objetos y la sesión puede salir bastante peor, así que sobre la luz, esta es mi recomendación.
Enfoca a los ojos
Como en cualquier tipo de fotografía, fijar la atención en los ojos es una buena idea, ya que los ojos son una parte del cuerpo que expresan muchísimo además de que, inconscientemente, nuestros ojos se fijan en la parte enfocada de los ojos de la otra persona o animal, y es por eso que si no están bien enfocados no nos parecerá una buena foto.
No enfoques a los ojos
Si antes hemos visto que el enfoque en los ojos es importante, también lo es lo contrario, es decir, no enfocar a los ojos y enfocar a otra parte, como en la primera fotografía de la entrada, donde el autor se centra en la lengua.
Fotos Andrew Morrell, Vincent, Tambako, jpctalbot, nyominx