Si te gusta el mundo de la fotografía seguro que tienes una buena cámara. Y seguro que has utilizado algún que otro filtro para darle un toque distinto a las fotografías. Por regla general podemos hacer las fotografías directamente con un filtro, ya que la mayoría de las cámaras nos dan la opción, pero en ocasiones tenemos que usar algún programa secundario.
De una forma o de otra, todo el mundo tiene, o va a tener, al menos, una foto en blanco y negro y otra en sepia. Estos filtros son los más populares, pero la gente no suele utilizarlos de manera adecuada, ya que cualquier foto en blanco y negro o en sepia no tiene por qué quedar bien.
El color sepia se ha utilizado por regla general en bodas y celebraciones similares, y es que este tipo de filtro le ofrece a la fotografía un toque atemporal que no se consigue de otra forma. Usando el filtro sepia conseguimos que la foto no parezca tan antigua con el paso de los años.
Otro objetivo de este filtro es el de darle solemnidad a la foto. No vale poner en sepia la foto de tu mascota corriendo, y es que el sepia es más para objetos estáticos y similares. La solemnidad en la foto es difícil de conseguir, pero si sabemos sacar el encuadre adecuado y pasarle un buen filtro en sepia se puede conseguir de una forma excepcional.