Ya hemos aprendido a utilizar dos filtros de colores de los cuatro que os voy a mostrar. Si encontramos nuestro filtro favorito seguro que hacemos mucho uso de él, y es que este tipo de accesorios no están tan valorados como deberían. Con un filtro de color damos ese toque especial a una foto simplona, sobre todo si dicha imagen tiene unos colores muy vivos.
En las fotos en blanco y negro el filtro amarillo es de lo más útil, y es que todo lo que sea dar otra intensidad a las fotos es algo que debemos tener muy en cuenta. Si buscamos fotografías con calidad y belleza tenemos que hacer uso de este tipo de filtros, sobre todo si estamos más interesados por la foto en blanco y negro que por la foto a color.
El filtro amarillo se utiliza, principalmente, para dos fines: absorber la luz y los rayos ultravioletas. Este filtro es tan especial porque impide que los colores “modificados” por los rayos ultravioletas se vuelvan completamente naturales y simples. También, como el resto de filtros, el filtro amarillo sirve para oscurecer y aclarar algunos colores.
En primer lugar, el filtro amarillo aclara los colores amarillo, verde, rojo y naranja. Es ideal para hacer fotos en otoño, y es que la imagen otoñal de las hojas enrojecidas queda perfecta con este filtro. Por otro lado hay que destacar que oscurece dos colores principalmente: el azul y el violeta.
A la hora de fotografiar un cielo éste se verá más oscuro, pero con una luz mucho más pura e intensa. También aclara la piel en las fotos que hagamos de retrato.