Si uno se pone a sumar el precio de un buen equipo profesional, lo más probable es que termine echándose las manos a la cabeza para después decidir dedicarse a otra afición o profesión menos exigente.
Cámara semi-profesional: unos 1500€; tres objetivos en condiciones: 2000€; flash externo: 400€; equipo de estudio elemental: 500€; otros accesorios (filtros, grip, etcétera): otros 500€. En definitiva: unos 5000€ para tener un equipo básico para dedicarse de manera semiprofesional a echar fotos.
Y no exagero en absoluto. Si nos poneos a sumar elementos profesionales, la cosa se nos puede ir a los 20.000€.
Pero no hay que desesperarse. A no ser que vayamos a rentabilizar el equipo recibiendo encargos profesionales con frecuencia, no tiene sentido apuntar tan alto. Para empezar e ir recibiendo nuestros primeros encargos, podemos bajar ostensiblemente el precio (y las prestaciones) de nuestro equipo.
Un ejemplo a este respecto es el nuevo flash Yongnuo 560 II, un flash de corte strobist que puede ofrecernos unos magníficos resultados si le echamos paciencia y mucha imaginación.
En lo que se refiere a nombre y aspecto, llama poderosamente la atención sus similitudes con el ya clásico Canon Speedlite 580 EX II, claro que éste cuesta cerca de los 400€ mientras que el remedo de Yongnuo no alcanza los 100.
Se trata de un flash manual (hay que calcular la relación entre la potencia del flash, la apetura del objetivo, el iso y la velocidad de obturación a ojo) que se puede sincronizar con otros objetivos por “simpatía” (recibe el estímulo lumínico de los otros flashes y reacciona al instante para sincronizarse de una manera bastante precisa).
Por lo demás, dispone de un número de guía de 56 metros, tres modos de disparo, cabezal basculante, una duración del flash emitido de hasta 1/200 segundos, se carga en un tercio de segundo y viene dotado de un pie para colocarlo donde se nos ocurra. Además, posee función estroboscópica y un pack externo de baterías.
En definitiva, un flash perfectamente válido y muy barato recomendado hasta por los principales responsables del movimiento Strobist.
Fotografo Alicante says
Con los precios que comentas, yo tengo una Sony A7 con el Sonnar 35mm 2.8 y la Canon 6D con el 24-105L, el 35 2.0, el 50 1.8 y el 24 2.8, un estudio de fotografía de producto, un equipo de iluminación continua, un flash Canon 430EX y me han sobrado unos 500€. Se puede ahorrar bastante buscando material de segunda mano en buenas condiciones 😉