Renovarse o morir, parece ser la máxima de todos los fabricantes de cámaras de consumo. Y mientras algunos optan por consumirse (caso Kodak), los demás siguen erre que erre incorporando innovaciones menores a sus nuevos modelos (con la excepción, claro está, de Leica).
Así, tras un aluvión de rumores (de algo tienen que alimentarse las revistas), llegan dos nuevas cámaras de la mano de Sony, que insiste en su ya exitoso modelo de negocio.
La Sony NEX-F3 es prácticamente igual que la NEX-C3 en lo esencial: mismo sensor, misma velocidad ISO, misma resolución y misma velocidad de obturación.
Sus novedades se refieren más bien a la usabilidad de la cámara: su pantalla trasera es abatible ahora hasta los 180º, facilitando la toma de fotos intrépidas y los autorretratos. Asimismo, es capaz de grabar vídeo a mayor resolución y posibilita hacer zoom sin perder claridad en la imagen, una función para autoencuadrar los retratos y poco más.
En lo que se refiere a la Sony A37, mantiene su sensor translúcido, su resolución (16 megapíxeles), su grabación de vídeo Full HD y la velocidad de obturación. Entre sus novedades, destacar un mayor rango ISO (hasta los 16.000) y la incorporación de una pantalla LCD trasera abatible.
Aunque aún no han aparecido los precios oficiales para España, nos consta que en Alemania saldrán por unos 600€ (la NEX-F3 con un objetivo zoom regulero) y 500€ (la A37, sin objetivo alguno).
Asimismo, Sony ha presentado dos objetivos para completar la oferta de sus nuevos modelos: un 18-135mm f3,5 para la Alpha y un muy interesante E 18-200mm f3,5 para su NEX, que se convierte en el primer zoom serio para las cámaras con sensor translúcido.
Desde luego, da que pensar que los dos modelos tengan un precio idéntico aun partiendo de dos tecnologías completamente dispares.