Si hay un retratista contemporáneo que brilla con luz propia en la actualidad ése es Pierre Gonnord (aunque no nos olvidemos de García Rodero y Jordi Gual). Su estilo pictoralista, sus acabados expresionistas y la cotización de su trabajo han terminado por convertirlo en una suerte de clásico en vida.
“Pierre Gonord” ha sido publicado por la editorial La Fábrica e incluye más de cien retratos del gran fotógrafo francés a lo largo de ciento tres páginas que recogen sus obras más importantes realizadas entre 1999 y 2012.
A través de ellas podremos apreciar en toda su precisión (nunca nos cansaremos de subrayar la importancia de la fotografía impresa) un estilo que está marcando época y que se basa en la indagación en la naturaleza y el espíritu humanos.
Gonnord hace destacar sobre fondos oscuros unos rasgos peculiares que ha ido rastreando a lo largo y ancho de todo el mundo. Como él mismo señala, empezó fotografiando gente de su barrio para luego necesitar “ir a otros lugares”, interesándose muy particularmente por “individuos y colectivos definidos por razones sociales”.
Los estragos del tiempo y el esfuerzo cotidiano llenan de cicatrices y expresiones singularmente duras los rostros de sus retratados, que parecen asaltar al espectador desde la misma fotografía.
Recordar que Gonnord es un fotógrafo autodidacta que en la actualidad reside en Madrid. Tras pasarse buena parte de su vida retratando el espíritu de Occidente (su rostro, su expresión), ahora mismo está desarrollando nuevas series centradas en las minorías sociales y las etnias más marginadas.
El libro publicado por La Fábrica hace apenas una semana tiene un precio nada desorbitado (45 euros), y podéis encontrarlo tanto en las librerías más afortunadas como en la propia página de la editorial, a la que os dejo un enlace para que os animéis a regalaros una auténtica joya de la fotografía.