Buyers Laboratory LLC es una organización que se dedica a analizar la eficiencia de los productos fotográficos para que los potenciales compradores nos hagamos una idea de cuáles son los más respetuosos con el medioambiente y cuáles son, a la larga, los más rentables desde un punto de vista energético.
Pues bien, en la edición invernal de sus premios Canon se acaba de llevar siete de sus premios, lo que no le viene nada mal a la compañía nipona tras los últimos fiascos referidos a sus cámaras digitales.
Por un lado, se ha hecho con seis “Outstanding Achievment”, premios que reconocen la calidad de aquellos productos que alcanzan la excelencia en su rendimiento; y, por otro, se ha hecho con el “Line of the Year”; esto es: con el premio que galardona toda una línea de productos.
Todos estos reconocimientos están centrados en las impresoras de la multinacional. Más concretamente en la línea compuesta por los siguientes seis productos: imageRUNNER ADVANCE 6075 Series, imageRUNNER ADVANCE 4051i, imageRUNNER ADVANCE 4025i, imageRUNNER ADVANCE C2030i, i-SENSYS LBP6670dn y i-SENSYS LBP6680x.
Se trata de la gama alta de impresoras de formato A3 y A4 de la firma, de la que se destaca su capacidad para ofrecer unos resultados profesionales empleando entre un 37 y un 62% menos de energía que los modelos similares de la competencia.
Con estos galardones se premia, asimismo, la inversión que Canon hace en investigación y desarrollo (I+D), que repercute directamente no sólo en nuestra experiencia como usuarios (ahorramos muchos euros en la factura de la luz), sino también en el cuidado del entorno (a menor consumo energético, menor abuso de los recursos naturales).
Noticias como ésta deben llevarnos a plantearnos qué es lo compramos atendiendo no sólo al precio de las impresoras (en este caso), sino también a cómo se comportan sus fabricantes con nuestro entorno.