Vaya por delante que no tengo nada contra los filtros creativos (dejo de poner comillas porque cansan). Son un recurso muy manido que puede resultar extremadamente útil para aquellos foteros que tampoco se toman muy en serio la fotografía. Echan una foto, aplican un filtro y a subirla. Un instante recién captado con un efecto resultón que puede expresar incluso un estado anímico o cierta inquietud estética.
Primer contrasentido
Lo cuestionable, en mi opinión (subrayado y en negrita), es que cámaras de gama media-alta empiecen a incorporar este tipo de procesados automáticos. Más que nada porque es un contrasentido.
Si uno decide abandonar el mundo de las compactas es, justamente, para tomar las riendas de los resultados que se pueden obtener haciendo fotos. Es decir: para aprender a utilizar los controles manuales y ser verdaderamente creativo, a posteriori, con el procesado.
Los filtros creativos incorporados a las cámaras con controles manuales implican una flagrante contradicción que sólo tiene como objetivo vender más cámaras, acercar al usuario elemental a unos modelos que realmente no necesita. Le bastaría y le sobraría con un buen Smartphone o con una compacta.
Segundo contrasentido
Pero lo realmente cuestionable es el empleo del concepto “filtro creativo”. Porque ¿qué tiene de creativo aplicar un procesado más o menos automático? ¿Qué estás aportando como fotógrafo cuando utilizas un filtro vintage? Poquito, muy poquito.
Otra cosa es cuando te pones la corbata frente a Lightroom e investigas cómo conseguir esos efectos. Los manejarás a tu gusto, eliminarás procesos y serás verdaderamente creativo.
Último contrasentido
La creatividad, dentro de la fotografía, siempre se encuentra en los controles manuales y en el procesado no automático. Pensad que un ajuste automático sólo es un logaritmo que analiza las luces de tu foto y propone un histograma equilibrado. Busca cierta forma de objetividad que es completamente contraria a la creatividad.
Sí, es aconsejable buscar histogramas equilibrados para saber qué es lo correcto desde un punto de vista técnico, pero los procesados automáticos deciden por ti cómo equilibrar dicho histograma.
Concluyendo
La moda de los filtros creativos está invadiendo sectores en los que no tiene sentido. Y tampoco es que sea malo disponer de unas opciones de procesado automático que puedes utilizar o no; pero dichas opciones resultan incómodas cuando las vinculan a la creatividad.
Serafín says
Hola, he empezado hace muy muy poco con mi cámara nueva réflex (hará unos 4 meses) y la verdad que estoy muy contento con ella (una Canon 1100D) ya que creo que es muy versátil para multitud de situaciones sobre todo para principiantes como yo.
Antes de meterme en este mundillo las fotos las hacía con mi Nikon Coolpix3100 (viejos tiempos de esta grán camara compacta y compacta de verdad =D ) o smartphone y la verdad que los filtros “creativos” que vienen con muchas aplicaciones creo que están muy bien pero si no dispones de muchos factores como tiempo, disponibilidad de un equipo y te dan buenos resultados aunque estos filtros son filtros predeterminados y que dejan poco lugar a la imaginación.
No los veo un mal invento ya que para cosas rápidas dan “buenos” resultados e incorporarlos en una réflex tampoco lo veo tan mala idea ya que si he visto un lugar y un momento perfectos para hacer una gran fotografía y dispongo de un filtro que me gusta y sé que lo voy a aplicar después en el procesado, me quito un paso de en medio y consigo lo que quiero.
Bueno, es mi punto de vista ya que no soy un experto con la réflex para nada pero disponer de opciones en la cámara no lo veo algo malo (si son muchas será imposible el manejo) al menos en el aspecto este de los filtros.
Un saludo.
Pablo Bernardo says
Muy buenas, Serafín.
Yo también creo que el hecho de que una cámara réflex ofrezca este tipo de filtros no es malo en sí; lo que creo que sí es malo es que puede terminar entorpeciendo el aprendizaje de los que os iniciáis. Por ejemplo: imagínate que ves algo muy interesante que tienes que captar con cierta inmediatez, sin pararte a manejar los controles manuales porque no estás habituado. Entonces empleas un filtro y te queda algo realmente bonito. La pregunta es: ¿has aprendido algo al hacerlo? Es más: cuando llegues a casa, ¿puedes coger esa foto y variar su procesado? Por eso insistimos frecuentemente en la necesidad de disparar en RAW (vendrían a ser los negativos, los originales) y de trabajar los procesados en casa sabiendo siempre lo que se hace. Así, la próxima vez que te encuentres con una situación similar, sabrás reaccionar con rapidez para hacer una versión limpia, sin filtros de ninguna clase, y luego, en casa, aplicar el procesado que quieras. Pero insisto: no creo que los filtros sean malos en sí (existen de toda la vida, claro que analógicos), creo que actualmente son una moda que pueden ralentizar el natural proceso de aprendizaje.
¡Saludos y gracias por comentar!