Según informa Europa Press, tres jóvenes rusos se enfrentan a penas de hasta tres años de cárcel por subirse a la cima de la pirámide egipcia de Keops para realizar fotografías nocturnas.
Según la agencia de noticias, Vadim Makhorov y sus dos colegas aprovecharon el cierre de las visitas a las pirámides para subir a la cima de una de ellas, tras “quedar fascinados” y verse invadidos por un “irrefrenable” sentimiento de exaltación.
Así, acababan de asistir al espectáculo de luces que suele culminar cada jornada en las pirámides de Giza cuando, sin pensárselo mucho, buscaron un flanco de la pirámide de Keops que escapaba a la vigilancia de los soldados y en sólo 20 minutos se encaramaron a su cima, desde la que captaron una de las imágenes más preciosas e impresionantes que uno pueda imaginar.
Obviamente, los vigilantes nocturnos terminaron advirtiendo la presencia de los intrépidos jóvenes, que fueron detenidos y ahora se enfrentan a penas que pueden alcanzar los tres años de prisión.
Por un lado, hay que considerar que una cosa es la censura y otra perder el juicio porque llevas una cámara encima. Sólo hay que pensar un poco para saber que un monumento milenario no puede ser violado por mero capricho.
Aunque por otro, resulta completamente grotesco encerrar a una persona en la cárcel durante tres años por tomar una fotografía desde una pirámide.
Sin embargo, nos imaginamos que, ante la presión internacional, Egipto no tendrá más remedio que suavizar las penas.
Para terminar, aquí os dejamos las impresiones del joven Makhorov:
“Lo que vi desde allá arriba era la séptima maravilla del mundo. Tratamos de capturar la belleza de los paisajes en las fotos, para que los demás también pudieran ver este magnífico panorama.”