La historia de Angelo y Jennifer es, por desgracia, una historia nada singular. Su particularidad se encuentra en el hecho de que ha saltado del anonimato al mundo mediático gracias a la profesión del primero, que es fotógrafo, y a la última voluntad de ella: hacer llegar su propia experiencia a todo el mundo.
Se conocieron, se enamoraron y a los cinco meses decidieron casarse. Sin embargo, otros cinco meses después, Jennifer contrajo cáncer de mama (el más habitual entre las mujeres), y decidieron luchar juntos contra la enfermedad.
Angelo Merendino tuvo entonces una idea: retratar cada día el progreso de la enfermedad y su lucha contra ella para compartir con su familia el estado de Jennifer.
Así, la serie, que llamó “The Battle We Didn’t Choose” (esto es: “La batalla que no elegimos”), recoge desde los primeros meses de amor entre la pareja, mientras tratan de asumir la enfermedad, hasta los últimos días de la norteamericana cinco años después, cuando finalmente fallece.
La serie, completamente sobrecogedora y a la vez bellísima (cada imagen desprende amor y esfuerzo), hubiese quedado en el anonimato de no ser por la última voluntad de Jennifer, que pidió a su marido que hiciese pública su historia a través de las redes sociales.
De este modo, la batalla de la pareja se puede contemplar en la página que ha creado al efecto Angelo Merendino, así como en su Facebook.
Cientos de fotografías en blanco y negro que pretenden hacer llegar a todo el mundo la dureza que entraña esta terrible enfermedad, pero que también supone el testimonio de una historia de amor que se ha sobrepuesto al tiempo y a la ausencia.