El mundo de los fotógrafos de la BBC (Bodas, Bautizos y Comuniones) está absolutamente saturado. El intrusismo profesional (amateur, más bien) provocado por el hecho de que a día de hoy cualquiera tiene una cámara con la que cree poder hacer un reportaje de boda (sin tener ni idea y por unos precios que devalúan el trabajo de los profesionales) está provocando la irrupción de un nuevo estado anárquico en el que los fotógrafos de siempre están empezando a perder pie.
¿Que nos queda entonces a los fotógrafos profesionales? El aventurado mundo del fotoperiodismo (aventurado, sobre todo, por el cierre sistemático de diarios), el carísimo mundo de la moda (hay que disponer de un equipo bien grueso) y, por último, el fructífero nicho de la fotografía de interiores.
El atractivo de la fotografía de interiores
La fotografía de interiores es un sector al alza por tres sencillísimas razones:
En primer lugar, las inmobiliarias y los bancos poseen tal cantidad de casas vacías que hoy más que nunca necesitan mostrarlas de una manera atractiva y profesional.
En segundo lugar, la fotografía de interior no es para cualquiera. No basta con tener un iPhone y disparar, tampoco con introducir filtros y manejar dos o tres programas. Como veremos a continuación, es un trabajo muy específico que requiere de técnica, material y mucho ojo.
En último lugar, hay que rendirse a una evidencia: España vive mayormente del turismo, y la proliferación de hoteles, hostales y demás formas de hospedaje hacen necesario presentar las estancias y los entornos con un atractivo que antes no era indispensable.
Las dificultades de la fotografía de interiores
Pero como ya hemos señalado, la fotografía de interiores no es sencilla en absoluto. Sólo por enumerar la serie más habitual de dificultades, aquí van unas cuantas:
Tendremos que trabajar en espacios reducidos, lo que nos obliga a maximizar nuestros recursos y a operar con un equipo muy concreto. Además, la luz de las estancias y las habitaciones es siempre difícil, ya que no es aconsejable trabajar con iluminación artificial. Por último, el trabajo de procesado es realmente arduo, puesto que tendremos que prestar especial atención a la distorsión de lente y el ruido que sucede a las sensibilidades altas.
Así pues, si aún no se os han quitado las ganas de introduciros en este desafiante mundo, ojo al próximo post, que versará sobre los materiales que necesitaremos para hacer una buena foto de interior.