A no ser que se trate de una actualización menor, la mayor parte de las presentaciones de nuevas cámaras van acompañadas por la presentación de nuevos objetivos, diseñados para crear un kit más apetecible. Y así ha sucedido con la flamante Fujifilm X-M1, de la que os hablamos ayer.
Fujinon XF 27mm f2.8
Para empezar, la firma nipona se ha sacado de la manga una especie de pancake ultraluminoso que, haciendo juego con el tamaño de la X-M1, pesa sólo 80 gramos.
Según Fujifilm, se trata del objetivo más pequeño jamás fabricado para una cámara con sensor de tamaño APS-C, y destacan su luminosidad (f2.8) y que carece de anillo de diafragma debido a sus reducidas dimensiones. Así, éste se controlará desde el propio cuerpo de la cámara.
Sus 27mm, equivalentes en paso universal a 41, lo convierten en un muy buen objetivo para retratos.
Fujinon XC 16-50mm f3.5-5.6 OIS
Se trata del zoom básico para la nueva Evil de Fujifilm. Pequeño y compacto, trabaja, en paso universal, con 24-76mm y está estabilizado.
En lo que se refiere a su diseño interno, este 16-50 está conformado por 12 elementos diferentes organizados en diez grupos, destacando un elemento de baja dispersión y tres lentes asféricas, que, como ya sabréis a estas alturas, son idóneos para evitar las aberraciones y conseguir unos colores más definidos.
Aunque estos dos nuevos objetivos hayan sido diseñados para aprovechar el tamaño de la Fujifilm X-M1, también son compatibles con las dos otras Evil de la marca (a saber: la X-E1 y la X-Pro1).
Ahora bien, como el nuevo 27mm carece de anillo para controlar el diafragma, Fujifilm ha sacado sendas actualizaciones de firmware para que ambas puedan manejar el pancake desde el mismo cuerpo de la cámara.