Aunque no soy una fan incondicional de los horizontes rectos, entiendo que es importante saber hacer fotografías en las que el horizonte esté recto, una fotografía perfecta, luego ya podemos ir variando y hacerlo a nuestro gusto, pero primero tenemos que controlar esto a la perfección.
Es por eso por lo que hoy os voy a dar algunos consejos para conseguir un horizonte recto, consejos muy sencillos y fáciles de seguir, así que no tendréis ningún problema. Vamos a ello.
El trípode
Esto es lo primero que os recomiendo, y que os recomendarán en todos los lugares del mundo, y es el tener un trípode para realizar estas fotografías en las que el horizonte tenga que estar completamente recto.
El trípode nos permitirá trabajar más cómodamente, además de que no tendremos que aguantar el peso de la cámara, podremos encuadrarla a la perfección, podremos ajustar mejor la cámara…, vamos, que todo son ventajas, siempre y cuando sea una fotografía de este tipo, para otros escenarios puede que no os venga demasiado bien el trípode (como en el modo macro, que yo prefiero no usarlo).
Podéis usar cualquier trípode que tengáis en casa aunque, evidentemente, siempre es mejor que sea un trípode grande, más o menos de nuestra altura, para no tener que estar agachándonos, algo que tampoco es demasiado bueno para la salud.
Si no tenéis trípode, siempre podéis usar una piedra o muro elevado para dejar caer la cámara y hacerlo todo desde ahí, eso sí, cuidado y no fotografiéis el borde del muro, no es ese el horizonte que buscáis.
Seguiremos en la próxima entrada con más consejos.