En la entrada anterior empezamos a dar algunos consejos para poder estabilizar la imagen sin trípode, y es que, como bien dijimos ayer mismo, no siempre tenemos el trípode a mano y puede que lo necesitemos en uno de esos momentos en los que no tenemos con nosotros el trípode que seguro que sí tenemos en casa.
Pues bien, hoy vamos a seguir dando algunos de esos consejos, y es que seguro que alguno de estos consejos os son útiles, es más, como os aconsejé anteriormente, apuntaos estos trucos y llevadlos siempre en el bolso de la cámara, en el momento menos pensado puede que los tengáis que usar.
Sin más, vamos a seguir con estos consejos para que podáis ponerlos en práctica.
Usa un temporizador
Lo mejor si no se tiene la cámara bien estabilizada es usar un mando a distancia o temporizador interno, esto hará que movamos menos la cámara en el momento de pulsar el botón, así que os lo aconsejo.
Estabilizador encendido
Otra muy buena ayuda que nos puede ser útil, y que nos ofrece la cámara propia o el objetivo, es el estabilizador de imagen, este estabilizador, ya sea óptico o mecánico, puede ser de gran ayuda.
Activar el estabilizador de la cámara o del objetivo nos permitirá disparar a velocidades más bajas, lo que significa que la toma siempre será más estable y el trípode será menos necesario.
La configuración ya depende de la luz y la distancia focal que tengáis en ese momento.