Como todos los años por estas fechas, Leica ha premiado los mejores portfolios del año entre los cientos de proyectos enviados por fotógrafos de todo el mundo. La entrega de los premios se ha producido, como viene siendo habitual, en los Encuentros de Arlés, un festival fotográfico esencial en el continente europeo que se viene celebrando desde el año 1969.
Los Leica Award se crearon en 1979 para rendir pleitesía al inventor (el señor Oskar Barnack) de la cámara más codiciada del universo, y está dotado con un premio de 5000€.
Como particularidades del galardón, destacar que se premia todo un proyecto, no sólo una fotografía o una carrera; que se atiende tanto a la calidad artística de los portfolios como a su valor documental, y que el grandísimo Sebastiao Salgado se lo ha llevado en dos ocasiones.
En su edición de este año, la ganadora ha sido la fotógrafa rusa Evgenia Arbugaeva, quien con tan sólo 28 añitos ha desarrollado un precioso proyecto en torno al paisaje siberiano del pueblo de Tiksi y su historia. Un entorno blanquecino y helado que, tras su auge durante los años de bonanza de la Unión Soviética, ha caído en el olvido.
El premio a mejor fotógrafo revelación se lo ha llevado el esloveno Ciril Jazbec con Waiting to Move, portfolio con el que ha estudiado de una forma preciosista y reveladora el cambio climático en la isla Shishmaref (Alsaka).
Entre los finalistas, destaca muy particularmente el trabajo de dos grandes fotógrafos españoles: Mikel Aristregi y Javier Arcenillas, quienes han desarrolado sendos proyectos en torno a los olvidados.
En este enlace os dejo la página oficial con un precioso vídeo (con una música genial, por cierto) que recoge las fotografías de los artistas premiados y finalistas. Ojo, porque no tiene desperdicio.