Al principio fue un rumor, luego una forma de burlarse de la moda de las fotografías móviles con filtros creativos, y, finalmente, será una realidad a partir del primer trimestre del año que viene: Instagram pasará de ser un mero programa para convertirse en una cámara física de la mano de Polaroid.
Socialmatic es un proyecto de adr studio, que vio en el filón creado por Instagram una oportunidad única para crear la que puede terminar convirtiéndose en la cámara más rentable del mercado.
La idea es sencilla: crear una suerte de compacta cuyo software funcione de principio a fin como la aplicación de marras: filtros, tuneos, filosofía presuntamente lomográfica y redes sociales a saco. Disparar y compartir.
Claro que el proyecto necesitaba de una firma que se dedicase realmente a fabricar cámaras, y aquí es donde el concepto ha terminado de coger forma: Polaroid toma las riendas de la Socialmatic y se dispone a comercializar la cámara para el primer trimestre de 2014 por unos 300€.
¿Pero qué gracia tiene hacerse con una cámara al estilo Instagram si ya tenemos nuestros teléfonos móviles con la aplicación?, se preguntarán algunos. Pues muy sencillo: la gracia está en que la Socialmatic tendrá unas prestaciones muy superiores a las de casi cualquier teléfono móvil y además permitirá imprimir desde la propia cámara.
Así, y mientras no haya un cambio de planes, la cámara Socialmatic de Polaroid montará un sensor de 14 megapíxeles en su frontal y uno de 2 en su parte trasera; dispondrá de un flash LED, una pantalla táctil cuadrada, sistema Android y, lo mejor, un sistema de impresión integrado que hará uso de la tecnología Zink creada por Polaroid (imprimir sin tinta, vamos).
Si a todo esto unimos GPS y WIFI, mucho nos tememos que la cámara instagramer se puede terminar convirtiendo en un auténtico fenómeno de masas.