Celebrado por primera vez en el año 1964, Wildlife Photographer of the Year es uno de los más prestigiosos certámenes de fotografía natural de cuantos pueblan nuestro gregoriano calendario. Con él, el Museo de Historia Natural de Londres pretende promocionar la fotografía de la fauna salvaje y promover el interés por la naturaleza.
Rodeado de novias del más diverso linaje a lo largo de su historia (Kodak o incluso Shell, lo que no deja de ser un curioso oxímoron), en su edición de este año ha contado con el patrocinio de la prestigiosa cadena BBC, que ha ayudado a elegir a los ganadores entre nada más y nada menos que 43.000 fotógrafos procedentes de 96 países diferentes.
Sus categorías, como no podía ser de otra manera, son casi infinitas, y van desde los meros retratos hasta visiones creativas, el comportamiento de las aves o fotografías en blanco y negro.
En cualquier caso, dos son las categorías más relevantes dentro del certamen: la de fotógrafo de vida salvaje del año y la de mejor fotógrafo joven de vida salvaje.
El ganador en la primera sección ha sido el sudafricano Greg du Toit, quien ha sabido retratar una espectacular escena de elefantes fantasmagóricos en La esencia de los elefantes. La imagen está llena de paciencia pero también de una exquisita técnica: su aspecto, similar al de una fotografía tomada bajo el agua, es producto del empleo de una apertura pequeña y una velocidad de obturación muy lenta ayudada por un filtro polarizador, que ha convertido el crepúsculo en una suerte de extraña noche en la que casi se pueden palpar las patas de los mamíferos gigantes y “amables”.
El ganador del premio a mejor fotógrafo joven de vida salvaje se lo ha llevado el indio Udayan Rao Pawar gracias a un precioso e hilarante retrato de una cocodrilo que porta sobre su cabeza a todo su linaje. El joven fotógrafo sólo tiene 14 años.
Si queréis disfrutar con auténticas obras maestras de la fotografía de naturaleza, no dudéis en pasaros por la galería virtual que el Museo de Historia Natural de Londres ha diseñado al efecto. Si andáis bien de dinero, también podéis visitar la exposición física en la capital británica.