Tras anunciar el lanzamiento de sus dos primeros objetivos para cámaras sin espejo, Tamron ha presentado a través de una nota de prensa la comercialización del esperado Tamron 28-300mm f/3.5-6.3 Di VC PZD, un todoterreno de zoom especialmente generoso fabricado para las cámaras réflex de Canon, Nikon y Sony.
Cuenta con la estabilización óptica marca de la casa VC, y destaca, en primer término, por su diseño compacto y elegante, con unas dimensiones muy reducidas para tratarse de un zoom tan amplio.
En lo que se refiere a su construcción interna, consta de un esquema óptico compuesto por 19 elementos distribuidos en 15 grupos, entre los que podemos encontrar cuatro cristales de baja dispersión, tres elementos asféricos y otro híbrido, además de dos cristales antireflectantes y un recubrimiento especial que elimina reflejos en todos los elementos del esquema.
También destaca muy particularmente el empleo de un nuevo tipo de motor de enfoque PZD, que hace uso de un voltaje de alta frecuencia para desplazar con rapidez y sin ruido los anillos encargados de activar y centrar el enfoque.
En lo que se refiere a su apertura, parte de una máxima bastante luminosa de f/3.5, aunque resulta más llamativa la apertura mínima del diafragma, que alcanza la friolera de f/40. Enfoca a partir del medio metro de distancia, pesa 540 gramos y sólo mide sólo 9 centímetros.
De este modo, el Tamron 28-300mm f/3.5-6.3 Di VC PZD se presenta como un zoom todoterreno que lo mismo nos vale para fotografía de paisaje (ese f/40 es muy prometedor) como para retrato o fotografía deportiva; y aunque ha sido ideado para cámaras de formato completo, también es válido para réflex de sensor APS-C.
Saldrá a la venta el mes que viene, aunque Tamron no ha especificado aún su precio.
