Mientras esperamos a que con el fin del verano llegue Photokina, donde los fabricantes de cámaras sacarán todo su arsenal, Canon ha decidido presentar dos cámaras menores que vienen a alegrarnos un verano más bien soso en lo que se refiere a novedades. De un lado, una bridge escueta y mínima (la PowerShot SX400 IS); del otro, esta muy interesante Canon PowerShot SX520 HS.
Canon PowerShot SX520 HS
La SX520 viene a sumarse al eterno catálogo de cámaras bridge que podemos encontrar actualmente en el mercado. Una compacta con visos de réflex que ofrece, por mucho menos que una sin espejo, todo lo que necesita un aficionado a la fotografía: tamaño de sensor decente, controles manuales, velocidad y un buen objetivo integrado.
Así, la nueva bridge de Canon parte de un sensor CMOS retroiluminado de 1/2,3 en el que alberga 16 megapíxeles efectivos, más que suficientes para empapelar las paredes de nuestro cuarto con fotografías de gran formato. Cuenta con un procesador DIGIC 4+ y dispone de estabilización óptica de 2 pasos y medio.
Aunque su velocidad de obturación no supera los 1/2000, es capaz de realizar disparos en ráfaga de hasta 10 fotogramas por segundo gracias al procesador antes mencionado, y ofrece un sistema de enfoque automático basado en nueve puntos y en la detección de caras. Eso sí, si no nos gusta su funcionamiento, siempre podemos disparar con enfoque manual.
Graba vídeo en Full HD a 30 fps y se contenta con ISO de 3200, aunque si hay algo que haga interesante esta nueva bridge de Canon es su objetivo integrado, que pretende hacernos olvidar la necesidad de comprar una cámara de objetivos intercambiables.
La SX520 HS monta un objetivo Canon que parte de los 24mm (gran angular, sí) para extenderse hasta los 1008mm gracias a su zoom óptico de 42 aumentos. Es más, si no nos basta con esta aberración, podemos activar una función denominada UltraZoom, que multiplicará por 2 (digitalmente, por supuesto) la longitud focal.
Saldrá a la venta en el mes de septiembre por 300 euros.