Famosas ya por su intrincado y abigarrado diseño, las cámaras todoterreno de Ricoh acaban de ser actualizadas con el lanzamiento de dos nuevos modelos, que se diferencian de los pretéritos por mejorar levemente sus prestaciones.
Ricoh WG30-WG30W
Visten un nuevo sensor CMOS retroiluminado de 16 megapíxeles (2 más que la WG20), aunque conservan la mayor parte de las especificaciones de sus madres y su diseño, rematado por una rueda de pequeños flashes led que son especialmente útiles para realizar fotografía macro.
Con un objetivo angular integrado de 25mm, ofrecen un zoom de 5 aumentos, y conservan la pantalla trasera LCD de 2,7 pulgadas de la WG20, así como el sellado de todo el cuerpo para evitar filtraciones.
Disponen de modo manual de disparo, así como de una serie de modos automáticos que vienen acompañados por el predecible surtido de filtros creativos. Además graban vídeo en Full HD a 30 fotogramas por segundo.
En lo que se refiere a su resistencia, son capaces de soportar pesos de hasta 100 kilos y temperaturas de hasta 10 grados bajo cero. También graban vídeo y toman fotos durante dos horas a una profundidad de 10 metros bajo el agua.
La única diferencia entre la WG30 y la WG30W estriba en la conectividad wifi, sólo disponible en la última.
Saldrá a la venta a finales de año con un precio aproximado de 230 y 260 libras respectivamente (se desconoce por ahora su precio en España).
