Mientras todos esperamos a que pase de una vez el verano para que la feria Photokina sirva de escaparate para las novedades más rutilantes del año, Pentax se ha desmarcado del calendario usual para presentar su CSC más mona, pequeña y versátil.
Pentax Q-S1
Aunque conserva la mayor parte de las especificaciones de la diminuta Pentax Q, esta nueva S-1 incluye mejoras en sus especificaciones y un nuevo diseño retro y personalizable que hará las delicias de los fotógrafos más cool.
Así, monta un sensor CMOS retroiluminado de 1/1,7” con 12 megapíxeles; una resolución más que razonable para un captor de dimensiones reducidas. Incorpora el nuevo motor Q Engine, que permite realizar hasta 5 disparos en ráfaga y manejar un ISO máximo de 12.800.
Resulta especialmente llamativa la incorporación de un estabilizador mecánico que reducirá, además de las vibraciones, el precio de los objetivos intercambiables, así como la inclusión de un modo para jugar con el bokeh al margen de las especificaciones de la lente, lo que nos hace pensar en la idoneidad del modelo como puerta de entrada a la fotografía semi-profesional.
En lo que se refiere a su software, la Pentax Q-S1 dispone de los consabidos modos de disparo semiautomático, además de los más que presumibles filtros creativos, aunque (y esto es sumamente importante) también permite disparar en modo manual.
Graba vídeo en Full HD a 30 fps, y estará disponible en 40 acabados diferentes, permitiéndonos elegir entre 5 colores diferentes para la parte trasera de la cámara y 8 para su parte frontal.
Aunque no se han dado más detalles, se espera que salga a la venta coincidiendo con la inauguración de la feria Photokina, y se estima que su precio final será de 349€ sin objetivo y de 449 con el gran angular Pentax 5-15mm f/2.8-4.5.