El Ministerio de Cultura español ha recibido un directo a la mandíbula cuando Isabel Steva Hernández, Colita, ha rechazado palmariamente el Premio Nacional de Fotografía 2014. Dotado con 30.000€, el premio pretendía reconocer la trayectoria de la gran fotógrafa barcelonesa, que no ha dudado en remitir una carta al ministro de cultura Jose Ignacio Wert explicando las razones que la han llevado a tomar esta decisión:
Ignoro dónde reside este ministerio (el de cultura), e incluso si existe como tal. En cualquier caso, yo no lo conozco. La situación de la cultura y la educación en España, cómo expresarlo, es de pena, vergüenza y dolor de corazón. No es posible que exista dicho ministerio. Es una quimera. Habrá que esperar con ilusión otros tiempos, otras gentes, otros gobiernos, que nos devuelvan a nosotros el orgullo y a ellos el honor. Así pues, de momento, sr. Wert, no me apetece salir con vd. en la foto.
De este modo, el Ministerio de Cultura recibe en apenas una semana la negativa por parte de dos de los más importantes artistas españoles contemporáneos (Jordi Savall acaba de rechazar el de Música) a recibir los premios más importantes de cuantos se conceden en nuestro país.
Colita es una de las más grandes retratistas de la historia de nuestra fotografía. Empezó su carrera trabando amistad con gigantes de la talla de Oriol Maspons y Xavier Miserachs, trabajando para este último como laboratista y estilista.
Se especializó primero en el retrato de flamencos como Carmen Amaya, Antonio Gades o La Chunga, y posteriormente se inició en el mundo del cine adhiriéndose al movimiento visual de la Escuela de Barcelona.
Tras la caída de la dictadura franquista se convirtió en la mirada más significativa de la cultura catalana, retratando a sus pensadores, escritores y cantautores, como Joan Manuel Serrat; y a partir de los años 80 se centró en el análisis fotográfico de la Ciudad Condal, subrayando a través de su cámara los cambios más significativos que se fueron produciendo en su fisonomía.
Desde Fotosfera sólo nos queda felicitarla por el rechazo de un premio que en la actualidad está muy lejos de ser honesto o transparente.
Fuente: La Vanguardia