El amor por el minimalismo es una constante en lo que llevamos de siglo. Parece que los grandes fabricantes han decidido que cuanto más pequeño y ligero sea cualquier producto tecnológico, mejor. Sólo hay que echarle un vistazo a la gama Q de Pentax, a los Macbook Air de Apple o a la delgadez enfermiza de los teléfonos móviles más cotizados para que os hagáis una idea de lo que señalo.
Aprovechando esta tesitura, Sharp acaba de presentar el sensor CMOS más delgado del mercado, una miniatura de tan sólo 5,47 milímetros ampliamente dotado con unas prestaciones muy interesantes: graba Full HD, es capaz de albergar 12,1 megapíxeles en su diminuto corazoncito, posee estabilizador de imagen, autofoco y dispara en RAW. Por si esto fuera poco, su apertura es de f/2.5.
Como es lógico, este sensor no ha sido fabricado para vendérselo de manera directa al usuario corriente y moliente; aunque, si te apetece, siempre puedes pedir unos cuantos para usarlos como gemelos. Así, se trata de un componente avanzado para la fabricación de diversos dispositivos de dimensiones reducidas con cámara integrada.
Como podemos leer en la propia página de Sharp, el tandem sensor-objetivo se ha diseñado y fabricado para mejorar las ópticas de los teléfonos móviles o las cámaras integradas dentro de los ordenadores, ofreciendo 100.000 unidades al mes para el mejor postor.
A raíz de esta noticia, ya podemos hacernos una idea de por dónde irán los tiros en lo que a fotografía con teléfonos móviles se refiere; y estamos seguro de que Apple o Samsung terminarán haciéndose con los servicios de la empresa japonesa.
Lo que ya no tenemos tan claro es cuánto costará el sensor y hasta qué punto disparará el precio de los terminales móviles.