Desde que hago fotos no recuerdo un movimiento igual por parte de una compañía que se dedica a la fabricación monda y lironda de cámaras réflex: la creación de un modelo específico para hacerle fotos al cielo.
Sí, estoy completamente seguro de que marcas que se dedican al desarrollo de tecnologías muy específicas como Hasselblad (que además colabora con la NASA) o Phase One tendrán modelos adecuados para cada tipo de fotografía, pero lo de Canon me ha cogido completamente descolocado.
Según podemos leer en la propia página de la compañía, la 60Da es una cámara especialmente idónea para hacer fotos astrofísicas gracias a la implementación de un filtro de paso bajo modificado que, colocado frente a su sensor, hace que éste sea especialmente sensible a las luces infrarrojas, que son las que proceden mayormente de los astros.
En lo que se refiere al resto de sus prestaciones, éstas son idénticas a la de su hermana terráquea. A saber: sensor de 18 megapíxeles, pantalla LCD Clear View, iso de 100 a 12.800 y procesador de imagen DIGIC 4.
Lo que también parece una novedad (aunque intuyo que es una característica relativa a su software antes que a su hardware) es la posibilidad de emplear el programa EOS Utility para controlar desde el ordenador los time-lapses.
Eso sí, viendo las especificaciones de esta nueva Canon EOS 60Da no puedo evitar preguntarme cómo afectará este filtro de paso bajo sensible a los infrarrojos a las fotografías diurnas o al rango dinámico del sensor.
Por otra parte, creo que utilizar una cámara con un sensor de formato no completo para tomar fotografías al cielo nocturno lastrará las imágenes con ruido y poca nitidez. Aunque habrá que esperar a las primeras revisiones de la cámara para que nos podamos hacer una idea de las virtudes reales que ofrece esta 60Da.