La Guerra Civil española es, sin lugar a dudas, uno de los episodios más fascinantes de la historia de la fotografía (además de uno de los momentos más tristes y cruentos de la historia de España). En ella se dieron cita algunos de los más importantes fotógrafos de los que tenemos constancia, y ha dado lugar al nacimiento de un género que hoy día está alcanzando sus más altas cotas expresivas: el fotoperiodismo.
Por todos es sabido que Robert Capa tomó la fotografía más célebre del conflicto, y que su trabajo junto a la gran Gerda Tardo y “Chim” ha dado lugar a una de las intrigas más fascinantes del mundo de la fotografía.
Lo que no se sabía con certeza es hasta qué punto estuvo implicado Capa en el conflicto y qué relación mantuvo con Agustí Centelles, fotógrafo omnipresente en Cataluña durante la Segunda República Española.
Pues bien, gracias a la encomiable labor de los investigadores del Centro de la Memoria Histórica de Salamanca, ahora sabemos que ambos fotoperiodistas coincidieron en más ocasiones de la que se pensaba.
Así, se ha descubierto una fotografía de Centelles en la que aparece Capa junto al coche de Azaña y Juan Negrín en 1938, durante la despedida en Barcelona a las Brigadas Internacionales. Todo un hallazgo si tenemos en cuenta que los dos volvieron a encontrarse en el campo de concentración francés de Bram unos años después: el catalán, como reo; el húngaro, como enviado especial.
Por otra parte, no deja de resultar fascinante pensar cómo estos dos fotógrafos tan diferentes, que se fueron encontrando a lo largo de todos los episodios del conflicto bélico, captaron desde dos perspectivas enfrentadas un mismo hecho, llegando incluso a retratarse mutuamente sin pretenderlo.