No sé vosotros, pero yo tengo la manía de no dejarme fotografiar. Siempre llevo mi cámara encima y siempre digo lo mismo: no, no me hagas fotos, soy yo el que las hace. Prefiero que se me conozca antes por lo que soy capaz de ver que por lo que mi imagen pueda sugerir.
Pues bien, el Espacio Fundación Telefónica ha tenido a bien albergar la exposición de retratos de Enrique Cano “Fotógrafos: la voluntad de contar”, que viene a redundar de alguna forma en esta manía.
De lo que se trata en la exposición de marras es de rendir homenaje a los rostros que se esconden tras la cámara, de mostrar la apariencia de los mejores fotoperiodistas patrios de estos últimos 40 años (desde la Transición hasta nuestros días).
Según la organización, estas cuatro últimas décadas se corresponden con la época dorada del fotoperiodismo español; aunque este hecho tiene una explicación bien sencilla: durante el franquismo era prácticamente imposible ejercer una profesión que requiere de independencia, de la absoluta ausencia de coacciones.
Entre los fotoperiodistas cazados destaca la presencia de grandes como Manuel Barropedro (World Press Photo en 1981), Cristina García Rodero (Premio Nacional de Fotografía y World Press Photo (ojo) en tres ocasiones diferentes), Alberto García-Álix, Enrique Meneses o el inconmensurable Ramón Masats.
Un detalle muy a tener en cuenta es que cada uno de estos grandes del fotoperiodismo aparece retratado en la actitud y en el entorno con el que se sienten más identificados, lo que dota a cada fotografía de un valor no sólo documental, sino también psicológico.
La exposición se puede ver en Madrid desde este mismo momento hasta el próximo mes de enero (inclusive) de 2013.
Así que ya sabéis: si queréis ponerle cara a los auténticos protagonistas de nuestro fotoperiodismo, no dudéis en daros un paseo por la mencionada Fundación Telefónica de Madrid.
