Apenas dos semanas más y ya estaremos del todo inmersos en la vorágine consumista navideña. Hay que levantar el país como sea, y nada mejor que dejarse llevar por el espíritu navideño para que la economía respire y las familias terminen de ahogarse.
¿Y qué mejor para estos menesteres que contar con un miembro en la familia al que le guste la fotografía? Como bien sabréis, se trata de uno de los hobbies más caros que hay, y suele llevarnos invariablemente a la bancarrota.
Pero hay regalos económicos que te pueden ayudar a quedar como dios ante ese inquisitivo primo que se cree García Rodero, como los productos que ofrece Impossible.
The Impossible project
Como todos sabréis a estas alturas, las cámaras Polaroid naufragaron tiempo ha. Su lucha contra lo digital acabó con la mayor parte de sus películas y cámaras, dejando en la estacada a los amantes de lo instantáneo y lo analógico. Sin embargo, mientras la mayor parte del negocio se desmantelaba, un milagro se produjo en una planta de Polaroid ubicada en Holanda: los empleados despedidos decidieron comprar la fábrica que iba a quedar en desuso y se dedicaron, hasta el día de hoy, a fabricar sus propias cámaras y sus propios carretes.
A lo largo de estos últimos cinco años han sido capaces de emular los resultados de las viejas Polaroid partiendo de cero, y en la actualidad ponen a nuestra disposición productos sobresalientes a muy buenos precios.
Así, disponen de un total de 16 cámaras distintas, que van desde los 59€ hasta los 495; además de 9 tipos de películas en color y en blanco y negro que son compatibles con las viejas cámaras fabricadas originalmente por Polaroid.
Si la distancia o las compras online os echan para atrás, no temáis. Los productos de Impossible se hayan muy presentes en las tiendas vintage patrias. Sin ir más lejos, hace unos días me tropecé con una en Jerez de la Frontera (8 y cuarto).
Así que ya sabéis: si queréis sorprender a propios y extraños con un muy buen regalo a un muy buen precio, echad un vistazo a la página del proyecto.