Si las inminentes Google Glasses ya resultaron para algunos un ejercicio de extravagancia, la compañía norteamericana ha decidido ir más allá patentando un nuevo sistema que permitiría insertar una cámara de fotos en unas lentillas.
Como es obvio, sólo se trata de una patente, lo que implica que quedan infinitos trechos que salvar antes de materializar el invento; pero el mero hecho de que alguien se plantee el desarrollo de un sistema semejante sirve para que nos hagamos una idea de adónde nos puede conducir en un futuro muy lejano el matrimonio entre fotografía y tecnología.
Según la patente, el invento (¿Google Lens?) consistiría, básicamente, en introducir una micro-cámara, junto con su batería (micro también, cómo no), en una lentilla, aunque de tal modo que ésta no vería aumentadas sus dimensiones. La cámara estaría sincronizada con un dispositivo de almacenamiento portable, y registraría todo aquello que deseamos inmortalizar y se encargaría además de establecer los ajustes de cada toma.
De este modo, podríamos prefijar la exposición, la velocidad de obturación, el enfoque o la luminosidad de las fotos a pesar de las reducidas dimensiones de la cámara.
Aunque desde diversos medios se apunta a la posibilidad de que esta tecnología pueda dedicarse a la mejora de la vida de los invidentes, lo cierto es que también sería especialmente útil para su uso militar: una micro cámara prácticamente invisible haría las delicias de cualquier agente secreto.
Repetimos que sólo se trata de una patente (no, no se pueden encargar aún), y que como sucede con la mayor parte de las patentes, lo más probable es que al final se quede en una extravagante hipótesis.
Vía: 20 minutos