Si hacemos caso a esos sesudos estudios que presentan el iPhone como la cámara más empleada en el mundo (obviamente, gracias a Flickr), el que Apple acabe de anunciar el lanzamiento de un nuevo sistema operativo para el mes de otoño debería ser tan importante como la presentación de la Canon EOS 5D Mark III o e la renovación integral de Lightroom. Así que vamos a ello.
iOS 7 es la actualización más necesaria que ha presentado Apple desde el lanzamiento del iPhone original. El desarrollo inteligente y brillante de Android ha ido comiendo terreno a los de la manzana mes tras mes, lo que los ha obligado a remozar el aspecto de sistema operativo, su funcionamiento y el software que acompaña a su cámara.
Todos los que disponéis de un iPhone habréis caído ya en lo incómodo y obsoleto que resulta manejar su cámara, por no hablar de la absurda manera que tiene de funcionar la biblioteca, que almacena sin ninguna clase de clasificación las fotografías que vamos tomando.
Pues bien, la mayor parte de los esfuerzos de los de Cupertino han ido dirigidos a mejorar estos aspectos.
En primer lugar, el carrete al que iban a parar nuestras tomas se ha rediseñado por completo, pasando de ser un cajón de sastre a una biblioteca en la que las imágenes se ordenan por categorías y fecha de disparo.
En segundo lugar, el propio software de la cámara incluye ahora filtros automáticos al estilo Instagram que nos permiten ver en tiempo real cómo quedarán nuestras fotos tuneadas, posibilitando además elegir el formato de la fotografía (normal, panorámica o cuadrada) y la función de vídeo.
Aún es pronto para conocer todas las novedades referentes a la cámara más usada del mundo, pero mucho nos tememos que al final se tratará de un mero reciclaje de ideas procedentes de aplicaciones de terceros, como Snapseed o la ya mencionada Instagram.