Sin grandes alardes en lo que se refiere a sus prestaciones (elementales pero bien planteadas), Panasonic ha presentado junto a su nueva bridge una cámara compacta que entra por los ojos y que destaca por la sencillez de su funcionamiento. Una cámara para usuarios que no buscan complicarse la vida sin renunciar a la calidad y al diseño.
La Lumix DMC-XS3 sólo tiene 14mm de grosor, y su forma es muy similar a la del archiconocido smartphone de Apple. En tan reducido espacio los ingenieros de Panasonic han sabido introducir un sensor CMOS de 14,1 megapíxeles que es capaz de grabar vídeo en Full HD (en formato MP4).
En lo que se refiere al objetivo integrado, destacan su estabilización marca de la casa (MEGA O.I.S.), su abertura de f/2.8 y su zoom, que parte de los 24mm en paso universal para alcanzar los 120 (zoom óptico de cinco aumentos y digital de diez).
Según la nota de prensa de la página de Panasonic, lo más destacable de esta compacta es su rapidez a la hora de ponerse a punto y la inteligencia de sus diferentes modos automáticos de disparo, que eligen invariablemente la mejor sensibilidad ISO, la abertura del diafragma y la velocidad de obturación.
El modo iA (intelligent auto) se encarga además de elegir el modo de escena más adecuado para captar adecuadamente lo que tenemos frente al objetivo.
Como viene siendo habitual en las cámaras compactas de gama baja-media, la DMC-XS3 ofrece una serie de filtros creativos (Creative Control, los llaman), así como una opción para tomar fotografías panorámicas.
Finalmente, la cámara más mona de Panasonic implementa un software para que podamos retocar las fotografías en la propia cámara, gracias a Creative Retouch y Beauty Retouch.
La Lumix DMC-XS3 saldrá al mercado en el mes de septiembre, y sólo costará 130€.