Después del éxito que están teniendo los nuevos Sony Xperia, el último movimiento de Nikon en lo que se refiere a sus compactas sin espejo no puede ser más acertado y oportuno: fabricar una cámara con interesantísimas prestaciones que sea todoterreno, que se pueda sumergir en el agua sin necesidad de carcasa y que sea resistente al polvo y los golpes.
De hecho, si no me falla la memoria, la Nikon 1 AW1 es la primera compacta sin espejo todoterreno, lo que probablemente la llevará a convertirse en uno de los modelos más exitosos de la firma.
Especificaciones
Pero más allá de sus virtudes materiales (sumergible hasta 15 metros y funcional a temperaturas de 10 grados bajo cero), la 1 AW1 es una muy buena cámara en tanto que cámara.
Viste un sensor CMOS CX (su tamaño es inferior al de un APS-C) con una resolución contenida de 14,2 megapíxeles (bien por Nikon), dispone de obturador electrónico, una velocidad ISO que llega hasta los 6400 (que se pueden forzar), un sistema de autoenfoque basado en el de las cámaras réflex (híbrido) y es capaz de disparar en formato RAW.
A todo esto hay que sumar una velocidad de obturación máxima de 1/16.000 (60 fotogramas por segundo: velocísima gracias a las dimensiones reducidas de su sensor), la grabación de vídeo en Full HD y la incorporación de un micrófono estéreo en el cuerpo de la cámara.
Por supuesto, la cámara es de objetivos intercambiables y dispone de controles manuales, como toda la gama 1 de Nikon, y además ofrece flash integrado, GPS y brújula.
De este modo, la Nikon 1 AW1 se convierte, por derecho propio, en una de las estrellas de la nueva temporada financiera, marcando un camino que la competencia no tardará en seguir.