Ahora que la red se está viendo invadida por un auténtico aluvión de fotografías, sus autores han corrido a plantearse la posibilidad de que se las roben. Y no deja de ser curioso cuando los fotógrafos profesionales raramente marcan sus fotografías con firmas o marcas de agua.
Pero para que todos nos quedemos más tranquilos, aquí va un pequeño tutorial sobre cómo insertar marcas de agua en nuestras fotos con Lightroom.
Las marcas de agua, arma de doble filo
Las marcas de agua son filigranas o firmas que se estampan sobre una fotografía para que ésta no pueda ser utilizada sin el permiso del autor. Así, deben ser lo suficientemente robustas para que impidan la reproducción ilegítima de la foto, pero a la vez lo suficientemente sutiles como para que la imagen se pueda apreciar sin problema alguno.
El problema de las marcas de agua es que suelen propiciar antes la distracción de la mirada que la disuasión de los ladrones de imágenes. Porque seamos sinceros: es bastante improbable que alguien decida copiar nuestra imagen cuando hay millones similares en la red.
Por otra parte, el empleo de firmas o marcas de agua suelen subjetivizar la foto. Terminan haciendo que atendamos antes a su autoría que a su calidad, y en el peor de los casos que nos preguntemos qué pudo ver el fotógrafo en ella para que se atreva a firmarla.
Por todo ello, recomendamos encarecidamente obviar el uso de las marcas de agua y que asumamos que el mejor medio para preservar los derechos de nuestras obras pasa por no subirlas a internet o por confiarnos a los datos EXIF, así como por subirlas con una calidad baja para que su uso sea completamente desaconsejable.
Hacer marcas de agua con Lightroom
Ahora bien, si nos empeñamos en marcar nuestras fotos, pocos programas hay tan adecuados como Lightroom.
Para hacerlo, sólo tenemos que “clickear” sobre la imagen con el botón derecho del ratón e irnos a la opción “exportar”. Entonces, abajo del cuadro de diálogo emergente, nos aparecerá la opción “marca de agua”.
Una vez dentro del nuevo cuadro de diálogo encontraremos infinidad de posibilidades, todas ellas de lo más intuitivas.
Podemos insertar una firma o texto escribiendo en el cajón que aparece debajo o podemos elegir una imagen o firma ya creada. Posteriormente tendremos la opción de darle opacidad a la marca, de colocarla donde nos plazca o de darle el tamaño que queramos.
Como señalamos más arriba, la mejor opción es optar por una marca que impida la utilización de la foto pero que a la vez permita verla sin demasiadas dificultades.