La estatura de un fotógrafo se mide antes por su generosidad que por la cantidad de premios que ha recibido a lo largo de su carrera. Y en este sentido, se puede afirmar que Ángel de la Hoz es uno de nuestros fotógrafos documentales más grandes.
Así, a sus 92 años, acaba de donar al Centro de la Documentación de la Imagen de Santander (CDIS) la friolera de 18.000 fotografías para que sean conservadas, digitalizadas y compartidas de manera gratuita.
El fondo iconográfico cedido por de la Hoz incluye no sólo fotografías tomadas por él mismo, sino también más de 4000 fotografías anónimas que muestran el desarrollo de la región cántabra durante el último siglo.
No en vano, el fotógrafo santanderino ha especificado al entregar su archivo que considera del todo indispensable que se distingan en todo momento y lugar las fotografías que él ha tomado de las que ha ido coleccionando.
Entre los tesoros que integran esta inmensa colección destacan algunas de las primeras fotografías del interior de las cuevas de Altamira, que, cuenta de la Hoz, aún no mostraban los colores vivos que ahora podemos apreciar tras su restauración; así como una serie de retratos de la inmensa Audry Hepburn tomados en los años 50, cuando rodaba Una cara con ángel.
El amor por su tierra no ha sido, sin embargo, el único motivo que ha llevado al fotógrafo cántabro a ceder al CDIS su colección. Según ha admitido durante el acto oficial de entrega del archivo, la calidad de los sistemas de documentación del centro han pesado mucho en su decisión.
Por supuesto, ahora resta un largo camino de restauración y digitalización antes de que podamos acceder a los tesoros de Ángel de la Hoz, un proceso que puede tardar, según los directores del CDIS, hasta cinco años.
Fuente: La Información
