Si os habéis fijado, la inmensa mayoría de las marcas que se dedican a la fabricación de cámaras compactas trabajan con dos gamas bien diferenciadas. Por un lado, una integrada por modelos baratos que ponen todo el acento en el objetivo integrado y su zoom; del otro, una que destaca por modelos caros en los que se mejoran el sensor y el objetivo, que tiene un zoom menos llamativo.
¿A qué se debe esto? Muy sencillo: los objetivos sufren muy especialmente cuando se les monta un zoom de largo alcance. A mayor rango focal, más elementos y cristales hay que meter dentro del objetivo, por lo que se reduce ostensiblemente la calidad de imagen.
Ahora bien, según se puede extraer de la página holandesa de Canon, la marca japonesa está a punto de sacar al mercado una compacta que parece romper con esta premisa, uniendo en una misma compacta un sensor grande y un zoom más que generoso.
Como podéis ver en la imagen que abre esta entrada, la nueva compacta de Canon formaría parte de su gama alta, compartiendo podio con las G7X y la G1X, pero a la vez montaría un objetivo dotado de gran zoom.
Aunque, como es obvio, aún no se pueden extraer más conclusiones sobre la naturaleza de este modelo, lo más probable es que Canon haya decidido lanzarse por los cerros de Úbeda para proponer un modelo excepcionalmente caro, que una todas las virtudes de un modelo compacto sin objetivos intercambiables.
En cualquier caso, dentro de unas semanas saldremos de dudas.