Mark Littlejohn es, con toda probabilidad, el más merecido ganador de cuantos se han llevado el premio Landscape Photographer of the Year. Hasta 15 veces había accedido a la fase final, y había recibido incluso una mención de honor en la edición del año pasado (sí, un tipo empecinado).
Por otra parte, su extraordinaria fotografía de un pequeño arroyo atravesando las montañas de Glen Coe (Escocia) muestran el lado más interesante del paisajismo: su vinculación con la geometría y la abstracción.
Reconozco que la fotografía de paisajes nunca ha sido mi fuerte. Siempre he pensado (es una opinión, por supuesto) que es un tipo de fotografía que está muy determinada por las circunstancias, y que en consecuencia ofrece poca libertad. Así, no es lo mismo vivir frente al Himalaya, donde los paisajes son extraordinarios, que en el Barrio de Usera de Madrid (que también tiene su punto, la verdad).
Sin embargo, cuando el paisajismo deja de consistir en la captura de parajes para convertirse en un ejercicio de abstracción (como sucede con la fotografía de Littlejohn), la cosa cambia drásticamente.
Por otra parte, mayor parte de los ganadores en las distintas categorías que integran el Landscape Photographer of the Year 2014 son británicos, lo que tampoco deja de ser predecible, ya que el certamen sólo acepta paisajes del país británico. Sin embargo, no por ello deja de ser un concurso interesantísmo por su proyección internacional y el valor de sus premios (10.000 libras para el ganador).
Si queréis echarle un vistazo a los impresionantes paisajes que han resultado ganadores en las distintas categorías, no dudéis en visitar este enlace.
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